Los RAEE son los residuos de los aparatos electrónicos y eléctricos que pueden proceder del uso particular en las casas o usos profesionales. Estos RAEE suponen un grave problema ambiental debido a que su volumen cada vez es mayor y la peligrosidad de los elementos que componen estos residuos de aparatos eléctricos y electrónicos.

En el Real Decreto 110/2015 sobre RAEE, desde 15 de agosto de 2018, los agrupa en las siguientes categorías:

  • Aparatos de intercambio de temperatura
  • Monitores, pantallas y aparatos con pantallas de superficie superior a 100 cm
  • Lámparas
  • Grandes aparatos (con dimensión exterior superior a 50 cm)
  • Pequeños aparatos (sin ninguna dimensión exterior superior a 50 cm)
  • Equipos de informática y telecomunicaciones pequeños
  • Paneles fotovoltaicos grandes

La gestión de los RAEE debe hacerse de manera correcta ya que de no ser así puede conllevar daños muy graves para la salud de las personas y para el medio ambiente. Por ello la Administración en la Ley 22/2011 establece graves sanciones para que gestionen de manera incorrecta los residuos RAEE, ya que están clasificados como residuos peligrosos.

En esta ley se contemplan sanciones muy graves por la recogida de residuos RAEE sin autorización, por el abandono, vertido o eliminación indiscriminada, o la entrega, venta o cesión de residuos peligrosos a empresas no autorizadas, con multas desde los 45.000 € hasta 1.750.000€ si el residuo peligroso ha ocasionado un daño irreparable. Además, otras sanciones que pueden tener es la clausura temporal o definitiva de las instalaciones o la inhabilitación para cualquier actividad de recogida de residuos.

Se aplicarían sanciones graves para acciones de mala gestión de los RAEE como la mezcla de distintos residuos peligrosos, realizar la actividad de recogida de residuos sin autorización, el abandono, vertido o eliminación incontrolado sin suponer un peligro para la salud, el medio ambiente y los espacios protegidos, o no aportar la documentación solicitada, falsificar los datos o no etiquetar los productos que contengan residuos peligrosos. Dentro de las sanciones graves estarían multas entre 901 € hasta los 45.000€, aunque este importe podría aumentar hasta los 300.000 € si se trata de residuos peligrosos.

Como ya hemos visto la mala gestión de los RAEE, además de un daño grave para el medio ambiente y para la salud de las personas, puede salirnos muy caro. Por lo que para asegurarnos que lo realizamos de manera correcta debemos contactar con un gestor autorizado de residuos RAEE que se encargue de retirarlos con todas las garantías.
En Servicios Punto Viso llevamos a cabo la gestión de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE), siendo una de las empresas autorizadas en Salamanca. Si tienes RAEE y no sabes qué hacer con ellos ponte en contacto con nosotros www.serviciospuntoviso.comy nos encargaremos de ellos de acuerdo a la normativa, garantizando así proteger la salud de las personas y el medio ambiente.